«Nunca imaginé vivir tanto en tan poco tiempo»
Marcos Díaz, uno de los mejores arqueros de la historia del Club Atlético Huracán, tuvo la deferencia de charlar con todos los chicos de inferiores que ocupan el arco del Globo. El santafesino aprovechó para repasar su carrera, revelar algunos detalles íntimos de su vida y compartir algunos conceptos que los chicos podrán aprovechar para formar su carrera deportiva.
Su historia y los comienzos
«Está bueno que los chicos puedan hacer preguntas, sacarse dudas y que uno pueda contarle su experiencia. Tanto de chiquito hasta el día de hoy. Yo arranqué desde muy chico, a los nueve años. No fue fácil ni sencillo como se dice. A veces se cree que el jugador de Primera lo que le reprochan es que es fácil y no lo es. Los chicos lo viven ahora, los sacrificios que tienen que hacer, sus padres. Lo que cuesta mandarlos al club, comprarles el material de trabajo, botines, guantes o pantalones. Eso nadie lo sabe. Hoy por hoy, puedo decir que estoy bien pero yo la pasé como todos. Hoy tengo mi auto pero a entrenar me iba en bicicleta para ayudar a mi familia y no gastar en colectivo».
Su debut
«Fue muy lindo, lo estaba esperando. Debuté a los veintitrés años y ya estando cuatro años en Primera División. Yendo al banco, estando con el plantel y la verdad era algo que esperaba. Me sentía preparado, estaba esperando el momento. Se vive un poco de nervios, ansiedad de querer jugar y la alegría de estar viviendo mi sueño y el de toda mi familia. Se me cruzaban muchas cosas por la cabeza, todo el sacrificio que hice. Lo disfruté, los nervios y la ansiedad estaban hasta que sonó el silbato».
La búsqueda constante de nuevos objetivos
«No hay que conformarse. Llegué a Primera con diecinueve años y no se me daba pero nunca dejé de luchar, peleaba por lo que estoy viviendo por hoy. Me tocó de grande pero no hay que conformarse. He tenido compañeros que han debutado mucho más jóvenes que yo y hoy están jugando en un pueblo, sin desmerecerlo porque juegan y disfrutan pero no viven lo que yo vivi y sigo viviendo. Nunca hay que bajar los brazos, ese es el secreto. Soy un claro ejemplo, me tocó llegar a Huracán con veintisiete años y nadie creía en mí. Algunos no me querían, para qué iban a traer un tercer arquero. Hoy creo que tapé más de una boca, no hay que darse por vencido. A pesar de los palos en la rueda hay que seguir».
El sueño cumplido de ser campeón
«Si tengo que ser sincero, nunca lo pensé. Nunca se me cruzó por la cabeza vivir tantas cosas en tan poco tiempo. Como dije uno siempre busca llegar a primera, afianzarse y salir campeón pero nunca me imaginé tanto en tan poco tiempo. Es algo muy lindo, que se disfruta mucho».
La sensación al ser ovacionado
«Es algo muy lindo. Es un premio para nosotros. Me tocaba vivirlo con compañeros, tanto en Colón como acá en Huracán. Se siente hermoso, se te eriza la piel, lo disfruto. No es normal que a un arquero lo quieran tanto en un club».
Los referentes en el arco
«Miren a los arqueros de las grandes ligas que son muy completos. Yo de chico miraba a Oscar Córdoba, siempre fue un arquero referente para mí. La agilidad de piernas que tenía, la visión de juego y siempre estar adelantado a las jugadas. Hay que observar mucho a otros arqueros, de tratar de copiar o de imitar. Se aprende mucho mirando. Hoy la tecnología les permite mirar mucho fútbol. Yo aprendí mucho mirando y es fundamental. Miren a los arqueros de su equipo, a otros equipos, cómo los ven, cómo lo viven, qué hacen bien y mal, de todo se aprende. Yo mis partidos los vuelvo a ver y trato de corregir. Estuve mucho tiempo sentado en el banco y veía lo que hacía el arquero de mi equipo y el del otro. Hoy Neuer es uno de los arqueros más completos, está adelantado siempre a la jugada, es un jugador más y abajo de los tres palos es impresionante, un animal».
Cómo vive los partidos
«Los vivo muy especiales. Para mí un partido ideal es no mandarme ninguna macana y terminar el arco en cero. Soy muy autocrítico por más que ganemos 5-0. Si cometí un error para mi el partido no es perfecto. Busco el error porque soy muy exigente. Siempre veo los partidos después y me vuelvo a enloquecer porque ya vengo pensando en una jugada y la vuelvo a ver para ver qué tendría que haber hecho, qué podría haber hecho. Si tuve algún error, al otro día estoy entrenando a la par de los que no juegan porque me exijo».
Joaquín Mendive, juvenil y compañero del plantel
«Es un chico con mucho potencial que está creciendo a base de la confianza que se le está dando. Ya es el segundo año que está con nosotros y le ha tocado estar en el banco de suplentes. Eso también suma. Es un arquero en crecimieno y va mejorando muchas cosas, algunas falencias que uno le veía y que si sigue creciendo y no se conforma tiene futuro. Dios quiera que sea el próximo arquero de Huracán pero como le digo a todos, no empieza ni termina la vida futbolística en un solo club. Ojalá sea acá para todos, hay muy buenos arqueros, muy buenos entrenadores pero son muchos».
El consejo para los jóvenes
«Entrenen mucho, hay que aprender. Esto no termina cuando te vas del entrenamiento, siempre hay que ser consciente de qué falencias tiene cada uno para entrenarlas. Hasta el día de hoy yo sigo aprendiendo y si siento que me está faltando algo, me quedo a entrenar. Ustedes tienen que hacer lo mismo. Entrenaba a la mañana y a la tarde me iba a entrenar de vuelta en bicicleta haciendo el mismo trayecto dos veces por día. Hay que practicar todo, las dos piernas, los dos brazos, agilidad. Buscar y corregir cosas todos los días. Hay que hacer caso a los entrenadores, exigirse ustedes mismos para seguir creciendo».
La valoración de las pequeñas cosas
«A todo tienen que darle mucho valor. A venir a entrenar, a hacer el sacrificio, no solamente ir a entrenar o venir al partido porque más allá de ser una frase hecha, uno es jugador de fútbol veinticuatro horas al día. No tener que ir a un cumpleaños o perderte una reunión con la familia por venir a jugar. Por eso tienen que valorar mucho el día a día y no creerse que porque llegan a una categoría de AFA ya están hechos y no quedarse con eso, con la Reserva o la Primera División. Siempre buscar el crecimiento y hacer mucho hincapié en lo que les dicen sus padres y sus entrenadores.
No es fácil. Tienen que esforzarse muchísimo y entender que además del esfuerzo de ustedes, tienen una familia detrás haciendo sacrificios. Si quieren vivir del fútbol, tienen que vivir para el fútbol. La tecnología a veces los desvía del fútbol pero tengo que remarcar esto: no quieran tener el mejor o el último celular, preocúpense por tener el material de trabajo que es el que les va a dar de comer el día de mañana».
Rodrigo Germán Da Silva
Foto: Daniel Méndez