«Nosotros vimos nacer a ese equipo con un juego elitista»
Héctor Roganti y Miguel Angel Leyes, los arqueros campeones del Metropolitano 1973, charlaron en exclusiva con Huracán TV tras el homenaje a cuarenta y cinco años del título obtenido de la mano de César Luis Menotti.
El evento y la presencia de sus ex compañeros
Roganti: «Es bárbaro, algo inolvidable para nosotros ver a todos los muchachos. Es muy difícil juntarlos a todos porque somos un grupo que no estuvo tanto tiempo junto. Estoy contento, muy feliz».
El recuerdo que perdura en el tiempo
Leyes: «Dicen que los recuerdos están en la mente, pero para mí no, los recuerdos están en el corazón. El encontrarte con amigos de la época, que por diferentes circunstancias estuvimos alejados, es una alegría inmensa e impresionante. Entre todos se armó un equipo extraordinario. La mejor etiqueta es que venían a verlo gente que no era de Huracán, eso lo dice todo».
La óptica desde los tres palos de un equipo imparable
Leyes: «Yo fui suplente de Pichín en el ’73 y el fue suplente mío en la Copa Libertadores del ’74, así que nadie mejor que nosotros sabe lo que era. Nosotros vimos nacer a ese equipo, con una lucidez tremenda, con un juego elitista».
Roganti: «Ese equipo jugaba bien, jugaba a la pelota. Ahora se dice otra cosa, pero todo el mundo tenía la posibilidad de hacer en la cancha lo que tenía en la cabeza y en sus pies. Lo que tenía era que jugaban todos fenómenos».
El privilegio de formar parte de ese once inicial
Roganti: «Es algo muy lindo, muy emocionante. Que pase tanto tiempo y que los chicos nos llamen, se pongan como se ponen para mí es una alegría enorme. No se si lo merecemos, pero hemos hecho algo por un club que debería tener mucho más».
Un equipo que será difícil de imitar
Leyes: «Es complicado que se repita porque la época era otra. Si lo tengo que comparar, yo pensaba que no se podía jugar un fútbol de alta escuela pero lo logró el Barcelona. Guardando las proporciones, es el fútbol que nosotros practicamos en esa época».
Rodrigo Germán Da Silva
Foto: Andrea Imbechi