#HistoriaQuemera ¡Feliz cumpleaños, Raúl Navarro!
Historia Quemera

#HistoriaQuemera ¡Feliz cumpleaños, Raúl Navarro!

Hoy celebra natalicio (fechado 22 de febrero de 1942) Raúl Ramón Navarro, quien fue dueño del arco del Globo siete años y lo es de un récord huracanense desde hace casi medio siglo.

Se inició levantando polvo en potreros de San Francisco, antes de integrar el baby de 30 Marzo en aquella ciudad. Pasó luego a Sportivo Belgrano, donde hizo todas las inferiores y debutó con tan solo quince años. Tanto se destacaba que, a los dieciocho, fue citado al seleccionado de Córdoba, lo que resultó su catapulta hacia Huracán. A partir de entonces, de 1963 a 1970 fue un verdadero guardián de los tres palos. Sus 185 presencias resultaron garantía de seguridad, al igual que sus reflejos y la voz de mando con la que ordenaba a los defensas. Titular indiscutido, era una de las figuras de aquel tiempo de figuras, fundamental para la estabilidad del elenco blanco y rojo. Una marca lo testimonia: durante 1969 mantuvo la valla invicta por 738 minutos, récord huracanado nunca superado desde entonces.

Tras su paso por La Quema, el «Indio» viajó junto a Tito Gómez a Colombia para representar a Atlético Nacional. Allí, hasta 1979, consiguió dos campeonatos, subió a un pedestal para siempre y, en paralelo, ya nacionalizado fue el portero de la Selección «cafetera». Prosiguió en Millonarios de 1980 a 1981 y guardó guantes en Deportes Tolima un año después, aunque siguió ligado como técnico de este último club, del «Verdolaga» y de Junior de Barranquilla, entre otros, hasta 1984.

Consagrado bajo el título «Por siempre ídolo» en el 70 aniversario de Atlético Nacional (2017), es también uno de los grandes arqueros de la historia quemera y una leyenda del fútbol en Colombia, considerado por tal nación uno de los once mejores jugadores extranjeros de todos los tiempos. Nada grandilocuente, al tratarse de un golero que enfrentó a Pelé, Beckenbauer, Eusebio y Garrincha. Nada grandílocuo, para quien en Huracán tiene al menos 738 razones para ser recordado por siempre.

Gonzalo Hernán Minici