¡Gran victoria de la Reserva!

¡Gran victoria de la Reserva!

Huracán fue superior a Estudiantes y le ganó 2-0 en La Quemita, con una actuación sobresaliente del equipo de Claudio Cabrera.

No siempre se condice el rendimiento de un equipo con el resultado final, el fútbol no suele ser muy justo en la mayoría de los casos. Sin embargo, sí se hizo justicia este jueves por la mañana en La Quemita… ¿Por qué?

Porque Huracán, que fue muy superior a Estudiantes, le ganó 2-0 al conjunto de La Plata con los goles de Santiago Luján y Juan Gauto.

Es cierto que le costó. O mejor dicho, al principio se le hizo cuesta arriba. Primero generar las situaciones de peligro y después concretarlas. Incluso, hasta el palo contribuyó para que el Pincha no se pusiera en ventaja mediante un penal (sin merecerlo hasta ese momento).

Ya en el ST se vería otro Globo. Desde la concepción del juego, la pelota al piso, las sociedades en el mediocampo y, obviamente, la terminación de las jugadas.

Se vio reflejado, sin dudas, en los dos goles: primero con la recuperación de la pelota en campo propio, en la trascisión muy rápida entre defensa y ataque, y con el remate cruzado y a media altura de Luján para poner en ventaja al equipo de Chacho. Y finalmente, con la definición de Gauto, quien terminó poniendo cifras definitivas cuando quedó de frente al arco.

Muchas cuestiones positivas para destacar en este triunfo de la Reserva y no sólo que Rafael Ferrario atajó un penal cuando el Globo estaba arriba por un gol de ventaja, sino también otras que tienen que ver con la continuidad del proyecto que comenzó Gabriel Rinaldi el año pasado y que ahora encabeza Cabrera.

Proyecto que también incluye la evolución en el juego mismo de un equipo que intenta desplazarse por la cancha con la pelota al pie y que lastima la mayoría de las veces que se lo propone; y proyecto que también refiere, entre otras cosas, al respaldo del cuerpo técnico de Frank Darío Kudelka y del plantel de Primera División, que además de haber presenciado el triunfo de la Reserva, también son un apoyo constante para los más chicos, los que ya trabajan en la máxima categoría y los que no.

¡Vamos, Globo!